La División de Acuicultura de ACUINUGA trabaja sobre un proyecto de cultivo de lubina (Dicentrarchus labrax). El objetivo es el desarrollo de un producto de calidad superior al existente en el mercado de especies acuícolas. Tomando en consideración la ubicación geográfica del proyecto, se ha dividido el proceso productivo en dos fases claramente diferenciadas:
- La fase de preengorde se realizará en instalaciones en tierra específicamente diseñadas para este fin, prolongándose hasta que los alevines alcanzan el tamaño óptimo para ser introducidos en las jaulas;
- La fase de engorde se realizará en jaulas en el mar en las que se introducen los alevines y permanecen hasta que se extraen los peces adultos en el momento de su comercialización.
La sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente han sido premisas fundamentales durante la concepción de este proyecto, considerándose para las instalaciones de preengorde un sistema de recirculación de agua y la utilización de energías alternativas que ayudarán al ahorro energético. Para la fase de engorde se han seleccionado jaulas semi-sumergibles, minimizando así el impacto medioambiental y visual de estas instalaciones.
Sobre las características de la especie y objetivo de producción pueden destacarse diversos aspectos:
- Se cultiva una especie autóctona, minimizando la posibilidad de introducción de nuevos patógenos en el ecosistema local. Además, se trabaja con estirpes locales de alevines expresamente seleccionados para este fin, lo cual permite obtener un producto de mayor calidad, cumpliendo los requisitos necesarios para poder culminar con éxito el proceso de engorde.
- Al llevar a cabo el cultivo en las frías y ricas aguas de las Rías Gallegas se mejoran las cualidades organolépticas del producto, aproximándose en sabor a la lubina salvaje.
- Se utiliza un sistema de alimentación innovador, con dietas específicamente formuladas para el proyecto y elaboradas a partir de materias primas producidas localmente. Estas dietas han sido diseñadas para obtener animales magros, con bajos niveles de grasa y máxima palatabilidad.
- La talla de comercialización es superior a 1 kilogramo, cuando actualmente la lubina que se comercializa en mayor proporción es la denominada “de ración”, con pesos promedio entre los 500 y los 700 gramos.
- Se persigue la comercialización en vivo, con rutinas de manejo que incluyen tiempos desde la extracción a la venta inferiores a una hora. De esta forma se obtiene un producto que supera en frescura incluso a la lubina salvaje, que ronda las 12 horas desde su pesca hasta su comercialización.